Las técnicas de reproducción no aumentan el riesgo de anomalías citogenéticas.
Debido al creciente uso de las técnicas de reproducción por los problemas de fertilidad de la población actual, muchos se plantean las repercusiones que estas técnicas pueden tener en los futuros hijos.
Este reciente estudio analiza el riesgo de anomalías citogenéticas que pueden presentar los embarazos conseguidos mediante reproducción asistida frente a los embarazos conseguidos de forma espontánea. Para el estudio se han obtenido muestras de vellosidades coriónicas de mujeres embarazadas entre la semana 9 y la semana 12 de gestación y posteriormente, se han analizado citogenéticamente.
Al comparar ambos grupos, concepción espontánea y concepción mediante tratamiento de fertilidad, no se encontraron diferencias en el índice de anomalías citogenéticas. Así pues, estos resultados muestran que los tratamientos de fertilidad no incrementan el riesgo de anomalías citogenéticas en el feto al final del primer trimestre, ni la predisposición a tener ningún tipo específico de anomalía.
No obstante, se recomienda, independientemente del modo de concepción, que los médicos ofrezcan la posibilidad de realizar las pruebas diagnósticas no invasivas a todas las parejas, con el objetivo de detectar cualquier anomalía genética en el feto.