El síndrome antifosfolipídico (SAF) es una enfermedad autoinmune que puede tener consecuencias negativas en el embarazo. Este síndrome se asocia con mayor riesgo de sufrir abortos espontáneos, partos prematuros, hipertensión y crecimiento intrauterino retardado.
Por este emotivo, aquellas mujeres diagnosticadas de SAF deberán planificar correctamente su embarazo para evitar poner en peligro tanto su salud como la del futuro bebé.
Puedes leer el artículo completo en: Enfermedades autoinmunes: ¿cómo afectan a la fertilidad y al embarazo? ( 112).
Por Andrea Rodrigo (embrióloga), Marta Barranquero Gómez (embrióloga), Dra. Rut Gómez de Segura (ginecóloga) y Zaira Salvador (embrióloga).
Última actualización: 20/04/2021