El PGT es una técnica que permite estudiar el cariotipo del embrión y se indica por varios motivos. Uno de ellos es la edad de la mujer. A partir de los 38 años recomendaremos realizarlo tras una FIV porque sabemos que la tasa de embrión alterado cromosómicamente (aneuploide) aumenta exponencialmente respecto a mujeres más jóvenes y, a mayor edad, menor será la probabilidad de tener embriones sanos.
Esto explica que la probabilidad de embarazo sea cada vez menor con el paso del tiempo, al igual que la probabilidad de aborto vaya aumentando con los años.
Puedes leer el artículo completo en: Ser madre a partir de los 30 años – Ventajas e inconvenientes ( 53).
Puedes leer el artículo completo en: ¿Cómo influye la edad avanzada de la madre en el embarazo? ( 401).
Dra. Elena Santiago Romero
Licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad Autónoma de Madrid. Cuenta con un Máster en Reproducción Humana por la Universidad Rey Juan Carlos e IVI. Con varios años de experiencia como ginecóloga especialista en reproducción asistida.
Número de colegiado: 282864218