Antes de comenzar a utilizarlo es recomendable almacenar los cartuchos en el frigorífico entre 2 y 8ºC, sin que llegue a congelarse. De esta forma pueden mantener sus propiedades hasta la fecha de caducidad del envase.
Si no se pueden mantener a esta temperatura también se pueden conservar, sin que pierdan sus propiedades, a menos de 25ºC, pero es recomendable utilizarlo en un plazo máximo de 3 meses.
Una vez se perfora la membrana del cartucho y se empieza a utilizar, el tiempo máximo recomendado por el fabricante para su uso son 28 días. Aunque es cierto que los profesionales que lo utilizamos vemos que la eficacia del fármaco se mantiene durante más tiempo cuando se conserva en el frigorífico, sin aumentar los riesgos.
Es importante consultar con el ginecólogo cuando se inicie el tratamiento la forma de almacenamiento del fármaco.
