En primer lugar, vale la pena explicar que hablamos de que un ovocito es maduro cuando posee una dotación cromosómica adecuada para poder ser fecundado por un espermatozoide, lo que conocemos como metafase II.
En cualquier proceso de captación ovocitaria es posible obtener un determinado número de ovocitos maduros e inmaduros, lo ideal es que estos últimos estén en minoría con respecto a los primeros. La proporción habitual de ovocitos maduros recuperados tras la punción suele ser de un 85% si todo el proceso se ha desarrollado adecuadamente.
Por otro lado, durante el proceso de estimulación ovárica, es fundamental para que los resultados sean óptimos, la correcta administración de la medicación pautada por su especialista. Previamente a la punción ovárica para la recolección de ovocitos, concretamente entre 36 y 38 horas antes de que tenga lugar, se le habrá indicado administrarse una medicación cuyo principal objetivo es ayudar a la maduración final de los ovocitos y desencadenar la ovulación, esta medicación se encarga de generar un pico en los niveles de la hormona LH.
En ocasiones, esta medicación no se administraadecuadamente, bien por errores en la dosis o bien por no haber seguido la hora pautada , lo que lleva a un resultados de un mayor número de ovocitos inmaduros, siendo ésta una posible causa de los resultados no esperados. También pueden interferir otros factores como la edad de la paciente, o patologías que afecten al ovario y la calidad ovocitaria.
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