Seguir una alimentación adecuada es beneficioso para la producción de progesterona por parte del cuerpo lúteo.
De forma general, se aconseja el consumo de alimentos que favorezcan la circulación sanguínea como aquellos ricos en L-arginina y L-citrulina (sandía, salmón, guisantes, lentejas, semillas de chía y sésamo, frutos secos, etc.), los que estimulan la producción de óxido nítrico (remolacha, fresas, zanahorias, espinacas, acelgas, brócoli, etc.) y aquellos que contribuyen a la salud de la pared vascular (chocolate, ajo, cebolla, etc.).
Además, es crucial que los niveles de algunos micronutrientes como el omega-3, el zinc, la vitamina B6 y los antioxidantes también se mantengan en niveles adecuados. Para conseguirlo, se puede incorporar en la dieta algunos alimentos como, por ejemplo, nueces e hígado (ricos en vitamina B6); semillas de calabaza, marisco y carnes blancas (ricos en zinc); verduras, hortalizas y frutas (ricas en antioxidantes).
![Marta Barranquero Gómez](https://www.reproduccionasistida.org/wp-content/uploads/2020/09/Marta_foto-perfil-122x122.jpg)