La crisis de lactancia hace referencia a aquellos periodos en los que el bebé está más inquieto al amamantar. Lo más habitual es que estas crisis de lactancia ocurran alrededor de los 3 meses debido al aumento del apetito del bebé, ya que está creciendo y su cuerpo necesita más alimento.
Durante estos días de la crisis es normal que el bebé demande mamar con más frecuencia. Pese a que el número de tomas se vea aumentado en estos días, el cuerpo de la madre se adapta y aumentará la producción de leche para cubrir las necesidades del bebé.
La mujer podrá sentir sus pechos más blandos o vacíos durante este periodo de tiempo, pero no se recomienda recurrir al biberón.
Puedes leer el artículo completo en: Alimentación del bebé: ¿leche materna o biberón? ( 75).

Marta Barranquero Gómez
Graduada en Bioquímica y Ciencias Biomédicas por la Universidad de Valencia (UV) y especializada en Reproducción Asistida por la Universidad de Alcalá de Henares (UAH) en colaboración con Ginefiv y en Genética Clínica por la Universidad de Alcalá de Henares (UAH).
Número de colegiada: 3316-CV