Parece que algunos investigadores canadienses han podido concluir que determinados medicamentos antiinflamatorios no esteroideos son potencialmente abortivos y su ingesta supone mayor perjuicio que beneficio en mujeres embarazadas. Este concepto lleva bastante tiempo en estudio y es ahora cuando han salido los primeros resultados palpables.
Parece que tras muchas especulaciones sin llegar a ningún resultado concluyente, se han conseguido los resultados que se intuían sobre la ingestión de medicamentos durante el embarazo.
Siempre se ha dicho que durante el embarazo, la mujer no debe medicarse, siendo algunos medicamentos más peligrosos que otros. En la Universidad de Montreal de Canadá, se ha concluido un estudio por un equipo de investigadores, entre ellos Anick Bérard, donde se ratifica con resultados empíricos que existen cuatro principios activos que son altamente nocivos, pudiendo provocar en un porcentaje elevado un aborto involuntario en la mujer si se administran no sólo durante el embarazo, sino también si se ingieren quince días antes de la concepción.
El grupo control se formó con cerca de 5000 mujeres siendo casi un 8% las que habían ingerido los medicamentos estudiados, no consiguiendo llegar a buen término el embarazo en curso, mientras que, tan sólo un 2% del grupo control abortó. Este grupo control no había tomado ninguno de los medicamentos estudiados.
Estos medicamentos a los que nos referimos son fármacos antiinflamatorios no esteroideos como pueden ser el ibuprofeno, naproxeno, diclofenaco, rofecoxib o el celecoxib, siendo el más dañino el diclofenaco y el menos el rofecoxib.
Con todo esto y por todo ello, la mujer embarazada no debe nunca automedicarse por su cuenta y riesgo, puesto que los riesgos pueden llegar a ser fatales, pero sí acudir a un especialista para que le guíe y aconseje de forma segura.
Fuente: El Mundo
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