Con la novena semana empieza el tercer mes de embarazo. Este mes será el último del primer trimestre de gestación.
La semana 9 de embarazo supone el fin de la etapa embrionaria. El embrión termina de formar todos sus sistemas básicos que empezarán a funcionar.
El embarazo todavía pasa desapercibido en la mujer con 9 semanas. No obstante, la futura mamá sí que nota todos los síntomas característicos de una gestación y va ganando peso poco a poco.
A continuación tienes un índice con todos los puntos que vamos a tratar en este artículo.
La semana 9 de embarazo también es una etapa de grandes cambios para el bebé: casi duplica su tamaño y su alimentación ya depende de la placenta. El embrión mide aproximadamente 2,5-3 cm con nueve semanas. Además, el feto pesa alrededor de 2-3 gramos, un peso similar al de las cerezas.
Entre los cambios más relevantes en el desarrollo fetal se encuentran los siguientes:
El embrión ya puede moverse en esta novena semana de embarazo, pero son movimientos involuntarios que la mujer no puede percibir.
La novena semana de embarazo supone el final de la etapa embrionaria. A partir de este momento, el embrión pasa a denominarse feto, el cual sigue creciendo rápidamente.
Los síntomas de embarazo en la semana 9 siguen siendo los mismos que la mujer tenía la semana anterior. Puesto que se trata del inicio de la gestación, el cuerpo de la madre todavía se está adaptando y sufriendo varios cambios.
Estos síntomas puede ser diferentes de una mujer a otra. De hecho, algunas embarazadas comentan tener muchas molestias en el primer trimestre, mientras que otras apenas notan nada. Todo esto es completamente normal, ya que cada mujer y cada embarazo es distinto.
A continuación, vamos a comentar las molestias más comunes en las embarazadas durante esta semana nueve:
La fatiga y los mareos en la madre se deben a la disminución de la presión arterial. A partir de este momento, aumenta la demanda de sangre materna para poder alimentar al embrión.
La tripa aún no se nota porque el útero no ha salido de la pelvis todavía. No obstante, éste sí que tiene un mayor tamaño y la mujer comienza a aumentar ligeramente de peso.
Durante el tercer mes de gestación, es necesario hacer una visita al ginecólogo para empezar con el seguimiento del embarazo y hacer algunas pruebas diagnósticas.
En primer lugar, se hacen unos análisis de orina y de sangre para comprobar que todos los parámetros son normales. También se anotará el peso de la madre y su presión arterial, medidas que deben controlarse durante todo el embarazo.
A continuación, el ginecólogo hará una ecografía para tomar las medidas del embrión y comprobar que tiene latido cardíaco.
Esta prueba también es conocida como triple screening e informa de la probabilidad de riesgo de que el embrión posea alteraciones cromosómicas.
Para hacer el triple screening, el ginecólogo tiene en cuenta los siguientes parámetros obtenidos del análisis de sangre materna y la ecografía:
Si te interesa obtener más información sobre este tema, te recomendamos seguir la lectura en el siguiente post: Control médico durante el embarazo.
Si te interesa saber más información acerca de este estudio prenatal, te recomendamos visitar el siguiente artículo: La translucencia nucal y el cribado combinado del primer trimestre.
Una vez confirmado el embarazo y en la primera consulta al ginecólogo, éste hará una estimación de la fecha de nacimiento del bebé.
Para ello, es necesario hacer una ecografía para medir al embrión y tener en cuenta cuando fue la última menstruación de la mujer antes de la concepción.
Normalmente, el parto tiene lugar unas 40 semanas después de la fecha de la última regla (FUR), siempre y cuando la mujer tenga los periodos regulares.
Te invitamos a leer el siguiente artículo para obtener información más detallada sobre este tema: ¿Cuáles son los métodos para calcular la fecha del parto?
A medida que el embrión va creciendo y la mujer va aumentando de peso, las molestias en la espalda y las lumbares se van a ir incrementando. Por tanto, es recomendable que las embarazadas practiquen deporte desde el inicio de la gestación.
Caminar todos los días es una buena actividad para mantenerse en forma, combatir la fatiga y mejorar la circulación. Además, los deportes de intensidad moderada, como la natación o el pilates, aportan también múltiples beneficios.
En cuanto a la alimentación, la mujer debe seguir con la misma dieta sana y equilibrada de las semanas anteriores. Las frutas y verduras que aporten ácido fólico y vitamina C son indispensables. También es importante tener un buen aporte de calcio para el correcto desarrollo esquelético del feto.
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Por otra parte, para tener una buena digestión y evitar la formación de gases, sería importante seguir las siguientes recomendaciones durante la gestación:
Por último, es importantísimo que la mujer mantenga una buena hidratación, bebiendo agua de manera frecuente a lo largo de todo el embarazo.
En este vídeo, Silvia Azaña, embrióloga de Reproducción Asistida ORG, nos habla sobre el bebé en la semana 9 de embarazo y los síntomas más comunes.
Tal y como nos cuenta Silvia:
La semana 9 de embarazo es una etapa de grandes cambios para el bebé y es que casi duplica su tamaño.
La prueba del triple screening es una prueba universal que se realiza a todas las embarazadas, alrededor de la semana 12 de gestación. Estudia el riesgo de síndrome de Down, combinando marcadores de la ecografía del primer trimestre con dos hormonas que se analizan a la gestante (BHCG + AFP) y su edad.
Si el ginecólogo indica realizar estudios invasivos directamente (amniocentesis o biopsia corial) en casos de gestaciones previas con alteraciones cromosómicas, ya no es necesario hacer el triple screening.
Nueve semanas de embarazo equivale a 2 meses y una semana.
Si se trata de un sangrado leve, no debes alarmarte. Algunas mujeres pueden sufrir pequeñas pérdidas de sangre durante todo el embarazo. En caso de ser un sangrado más abundante, es recomendable acudir al médico tan pronto como sea posible, pues podría tratarse de una amenaza de aborto.
Te recomendamos leer el siguiente post para más información: ¿Es normal sangrar en el embarazo?
En la ecografía de la semana 9, es posible establecer el tipo de embarazo gemelar, es decir, el número de placentas y bolsas que hay.
Por otra parte, el aumento de peso en la mujer embarazada de gemelos o mellizos será más notorio que en un embarazo simple. Por tanto, el control de la talla y el peso debe hacerse de manera más cuidadosa, además de seguir todas las recomendaciones médicas para evitar posibles riesgos.
Para más información sobre el embarazo múltiple, te aconsejamos leer el siguiente post: ¿Qué diferencia el embarazo de gemelos del embarazo de mellizos?
Si te interesa continuar leyendo sobre las semanas de embarazo, te recomendamos entrar en el siguiente artículo: La décima semana.
Mantener una buena salud es indispensable para el correcto desarrollo del embarazo. Por tanto, la mujer embarazada debería seguir los consejos que comentamos en el siguiente post: La salud en el embarazo.
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