Aunque el parto en el agua ofrece algunos beneficios respecto del parto convencional, no siempre se puede aplicar. Por ejemplo, si es un embarazo múltiple, un parto prematuro o hay placenta baja, no estaría indicado el uso de la hidroterapia en el parto.
Tampoco es conveniente dar a luz en el agua cuando el feto está de nalgas, hay un sangrado vaginal activo, la mujer ha tenido más de 3 partos previamente o tiene alguna infección. Del mismo modo, si se ha puesto la epidural, no se puede dar a luz en una bañera o piscina.
Puedes leer el artículo completo en: ¿Cómo es el parto en el agua? – Beneficios y riesgos ( 72).
Por Andrea Rodrigo (embrióloga), Laura Rollán Guillén (embrióloga) y Marta Barranquero Gómez (embrióloga).
Última actualización: 24/04/2024